MTB. El rumor escondido.

   En una tarde ventosa, como todas, con las burras de monte nos ponemos Ruben, Toño y yo rumbo a un rincón de incomparable valor paisajistico. El Pozo la Fervencia.
    Nos lleva toda la tarde, desde la cinco hasta la nueve y media.. Rodando por pistas, caminos, cortafuegos y senderos para llegar a este bello salto de agua de la Fervencia, donde el agua hierve cuando cae.
    Subimos por el monte de la Marquesa para más adelante ir dirección Rabanal Viejo y dejando La Maluenga a la izquierda para alcanzar los 1375 m. de altitud. En este punto descendemos a la derecha por un camino, para después convertirse en un sendero lleno de robles y urzes que en muchas ocasiones te tapaba el camino a seguir. Bajamos sobre 260 metros en un descenso difícil. Nos separan 300m. del Pozo la Fervencia, tenemos que poner pie a tierra para caminar y así admirar este bello salto de la naturaleza.
    Salimos de este pozo ascendiendo por un camino diferente, muy empinado, para después llegar a un cortafuegos super empinado. La tercera parte de este maldito cortafuegos la hice a pie pujando por la correcaminos que se me negó a seguir cuando pedaleando el garmin alcanzo el 21%.
    Se nos hacia tarde, así que previniendo que se nos hiciera de noche rodamos de vuelta para Astorga por el camino de Santiago.
    Cuatro horas y media dando vueltas por los maravillosos montes de la Maragateria, que nos pasaron en pis-pas.

Todo el trayecto con la vigilancia del Teleno y el estropeado de Ruben.

Toño cruzando uno de los cuatro arroyuelos que conforman la cascada.

Llegando al atardecer  a casa.