Sin bici, al monte.

     En estos días que el invierno ha arreciado con frió,  fuertes vientos, lluvia y nieve no nos ha quedado otra que aparcar la bici y tirarse a patear al monte.
     El viernes a patear por la tarde al Becerril con Toño, Tito. Pepe y Foxter. En una subida exprés ya que lo hicimos la ascensión desde Pobladura en una hora y unos poco minutos. Nieve había poca, pero aire soplaba como nunca. Arriba en el alto a 1881m de altura hacia un frio endemoniado, se me helaba las cejas y el pelo por donde me había caído el sudor. El descenso también fue rápido ya que se nos hacia de noche, ya de hecho llegamos una media hora más tarde  de que atardeciera.
    El monte nevado estaba precioso y más a esta horas que se ocultaba el sol tenia unos contrastes de luz y colores fabulosos.
    Y como toda buena excursión la acabamos con unas buenas cervezas en el bar de Juanin.
    El sábado bici, el domingo poca bici y mal, soplaba mucho, y el lunes otra vez a patear por el monte.
    Esta vez nos dirigimos en coche Tito, Foxter y yo a Manzanal. Desde la gasolinera nos vamos dirección  el  Veigua  y pateamos esos montes durante dos horas.
    Armados yo de unas raquetas y Tito de unos esquís de travesía. Aqui había un montón de nieve. El final de esta excursion también quedo regada con unas ricas cervezas en el bar de la gasolinera del puerto.
                                                         
                                             SUBIDA AL BECERRIL.

 


                                                      PASEO POR MANZANAL.

    Haber si nos deja el mal tiempo y viene el bueno y empezamos a zumbar más a la bici. Aunque todavia nos quedara alguna que otra ruta que realizar a pie.